La Paz, es Pachamama viva, sus montañas viven, los autos andan como hormigas, mientras los apus Illampu e Illimani observan transitar a mama killa y tata inti; esta ciudad con cabinas del teleférico de colores como la wiphala, es una telaraña de costumbres, mitos e historias ancestrales que continúan vivas a través de sus pobladores.

Amalia Vargas nuestra corresponsal nos cuenta sobre las kapachaqueras y el arte de la sanación con ofrendas a la Pachamama.

Cuando nos preguntan sobre Bolivia, el primer lugar que nos viene a la mente es el Lago Titicaca y sus paisajes sacados de otro mundo. Pero este país tiene mucho más que ofrecernos, además de una naturaleza impresionante también tiene varias ciudades que son parada obligada. Algo que no nos podemos perder los que recorremos el camino de la medicina, es la calle de Las Brujas o Mercado de Hechicería, donde habitan misticismos y distintas leyendas.

Sabemos que el nombre del mercado suena extraño, pero las kapachaqueras no se sienten ofendidas, porque son reconocidas a nivel mundial. Lo primero que nos llamó la atención, además de los olores de plantas e incienso, son los artículos que tienen expuestos, especialmente los fetos de llama, ostras, raíces extrañas y las ranas secas. Las llamas sagradas. La llama es más que un animal, una ofrenda para el pueblo aymara –quechua.

En esta calle de las Brujas conocimos a dos mujeres vendedoras y especialistas en preparar las Ofrendas o mesas rituales a las Pachamama, Apus y Achachilas. Doña Verónica y Margarita Quispe, a quienes entrevistamos

¿Desde cuándo están ustedes trabajando en el mercado?
Somos la tercera generación desde mis abuelos, somos mujeres que preparamos mesas para la pachamama, para el florecimiento, para llamar el negocio, la salud, para la purificación, yo trabaje con mi madre y mi abuela, estamos desde que tenemos 13 años en este negocio, así fuimos aprendiendo.

¿De dónde son originarias ustedes?
Nosotros somos de Potosí del pueblo Catón Cawayos, de nuestros pueblos viene también la medicina de hombres y mujeres.

¿Son reconocidas hoy?
Hoy sí, en Bolivia a nivel nacional somos como 600 kapachaqueras, en La Paz como 200. En la constitución nacional somos reconocidas como kapachaqueras, ángeles de la guarda, junto con los Yatiris y Amawtas, somos reconocidas por nuestro trabajo. Antes éramos discriminadas, hoy somos más respetadas por estar en la constitución.

¿Cuáles con los elementos que necesita una mesa completa?
Los elementos de una mesa son los siguientes: el incienso, copal, los misterios, los misterios son elementos de azúcar con imagen que representan el trabajo, la salud, el amor, las naturaleza, la pareja, hombre o mujer, los animales, hay imágenes con autos, con bicicleta, dólar, casitas, estrellas, caminos, pachamama, pachatata. Todo lo que una persona en vida puede usar o consumir ahí está todo. Lleva además pan de oro, pan de plata, también hay símbolos en plomo, el dios del rayo, tiene el sol, la luna así completo se lo armamos.

Lo más principal es la coca que va coquear o pijchar, el cigarro para que la pachamama fume, el vino para tomar, esta mesa se llama chauchimesa.

¿Cuáles son los colores que usan?
Te diré solo algunos; el rojo lo utilizamos para el amor, el amarillo es el trabajo y negocio, y el verde es para el dinero.

¿Qué función cumple la mesa Blanca?
Las mesas blancas son para la salud, para las limpias, también para llamar las almas. Estas mesas son para encontrar la armonía, para limpieza y sacar las malas energías tanto en la casa como en el trabajo. Hay mesas que las hacemos con semillas.

Las mesas de colores son para el trabajo, para la economía, para llamar clientes. Recomiendo a la gente decaída que use la mesa blanca para llamar su espíritu. Para cada mesa se usan diferentes elementos, algunos usan algún misterio pero cada uno es diferente, el de las almas se realiza en un ahora determinada y lleva solo misterios de azúcar.

¿Que lleva una mesa para la mina o el tío?
Las mesas para el tío o la mina, las preparamos con coca, cerveza, cigarro. Y cuando nosotros vamos preparando lo que la persona quiere, ahí va saliendo como le va ir, todo tiene una lectura, a veces aconsejamos en salud y otros temas, según lo que salga en el armado de la mesa.

¿Cuándo debemos hacer ceremonia?
Recomiendo no olvidarse de los ancestros de sus antepasados, aunque sea una vez al año debemos agradecer a las montañas, a los que viajan si viene hagan un agradecimiento a la pachamama. Aunque los hermanos vengan cada 5 años deben hacer una ofrenda no deben olvidarse.

La gente se enferma porque se asusta o le da la kartja, la katja es cuando nos asustamos o nos roban ahí se puede salir su ánimo, es importante sahumarse y recuperar ese ajayu, para seguir sanos. También hacemos ofrendas para cuando uno tiene Qari qari.

¿Qué es qari qari?
Es cuando a la persona le han sacado el alma energéticamente eso no lo puede curar el doctor, el médico nosotros debemos hacer el preparado para que se cure eso es antiguo y existe. Ambas kapachaqueras se despidieron diciendo “A toda las personas las esperamos en Mercado de las Brujas, que queda en la calle Linares, gracias Margarita y Verónica Quispe”.

Ha sido muy interesante recordar toda la sabiduría que se sigue transmitiendo entre las mujeres jóvenes y las abuelas. Como dijo una Abuela, lo que existe y persiste es porque funciona, sino desaparece, es necesario conservar las costumbres y no olvidar la identidad ancestral. El mercado de las brujas se encuentra en el centro de la ciudad, disperso entre las calles Melchor Jiménez, Linares y Santa Cruz, muy cerca de la Iglesia de San Francisco, en pleno centro.

Por Amalia Vargas. Pukio Sonqoy
Fecha: 20/2/2019