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Yucat, el primer y único Parque Temático Indígena de la Argentina es también el resultado de la apasionante historia personal de sus creadores

En las afueras de la Villa de Merlo en la provincia de San Luis –uno de los microclimas del mundo- se encuentra “Yucat. Parque Tematico.Tierra de Comechingones” un inédito lugar que recrea a un pueblo comechingón, “donde uno se siente como si estuviera en el Siglo XVI”

A lo largo de 8000 m2, rodeado de las bellísimas sierras del lugar y bajo uno de los cielos más limpios del planeta, el visitante recorre la reconstrucción de una comunidad originaria tal como la vieron los primeros conquistadores españoles -a través de las crónicas- y los estudios antropológicos y arqueológicos, en especial el clásico ensayo de Antonio Serrano, “Los Comechingones”

El recorrido puede llevar entre 1 y 3 horas según se realice en forma individual, con guías, con audiotextos o visita de colegios. La visita resulta impactante al apreciarse distintas escenografías de la vida cotidiana de este pueblo excepcional de las Sierras Centrales: las viviendas semi subterráneas o cazas-pozo tan características, la caza, la agricultura, el pastoreo, las moliendas, el arte rupestre, los sitios ceremoniales chamánicos, la alfarería, los textiles, los utensilios y herramientas.

Todo es una fiel reproducción de situaciones y piezas originales y efectivamente la visita se transforma en una inmersión en la forma de vida de este pueblo extraordinario, tempranamente destruido por la conquista española, una de las tantas graves pérdidas de nuestro riquísimo pasado. Es imposible no pensar que sería hoy de nuestra cultura con la vigencia de pueblos originarios como los comechingones…muchos de los actuales descendientes se encuentran hoy en proceso de reconstrucción como tantos otros pueblos indígenas aniquilados en los procesos de conquista y seguramente Yucat (nombre de uno de los caciques del siglo XVI) será una gran ayuda y estímulo en esos procesos. Por lo pronto es un espacio educativo y de difusión que tiene además el plus de haber sido el primero en su tipo en la Argentina y por lo que sabemos hasta este momento el único.

¿Cómo fue que una idea tan distinta se convirtió en esta realización admirable? ¿Qué hay detrás de esta tierra de comechingones que hoy se presenta al público de una manera tan original, clara y didáctica? Es lo que nos proponemos descubrir hablando con Alberto Agustin Segade (48) quien junto a su mujer Andrea Vanesa Muzzopappa son los que idearon, crearon y sostienen este lugar.

-Alberto, ¿por qué un Parque Temático sobre los comechingones?

-Durante dieciséis años trabajé en el Área de Sistemas de un importante Banco internacional en Buenos Aires y si bien me encanta la profesión (Licenciado en Análisis de Sistemas de la UBA) mi trabajo y mi vida eran muy estresantes. Siempre tuvimos con Andrea la fantasía de irnos a vivir a algún lugar del interior de la Argentina, especialmente el sur, pero un dia conocimos Merlo, y nos enamoramos del lugar, al cual volvimos muchas veces. Hasta que todo comenzó con un sueño.

-¿Con un sueño? ¿Cómo fue eso?

-Una noche soñé con un Parque sobre extraterrestres o un Parque Temático de aborígenes de la zona y cuando desperté se lo conté a Andrea, quien eligió rápidamente la segunda opción. Ahí comenzó el camino hacia la realización del sueño. Debo decir que a mi desde chico me interesó siempre todo lo que tuviera que ver con la arqueología, la naturaleza, los animales, las plantas…una vez que tomamos la decisión me puse a investigar y de ahí no paré más. Cierta vez me topé con una frase de alguien que dijo “los proyectos hay que armarlos a lo grande” y así lo hice, de entrada nomás fuimos dando forma en nuestro pensamiento a algo sin tener en cuenta las limitaciones. Desde aquel sueño a la puesta en marcha del Parque transcurrieron 10 años.

-Imagino la cantidad de inconvenientes, decisiones que hubo que ir tomando, hasta que pudieron ir concretando el proyecto

Totalmente. La elección del lugar, la autorización del municipio que nos llevó casi un año de trámites (nos ayudó mucho la Directora de Turismo Marita Cuello), la venta de nuestra casa en Buenos Aires, el reacomodamiento de todos incluyendo a nuestras tres hijas, arreglar mi salida del Banco, encontrar a la artista que haría las esculturas que finalmente fue Viviana Palestini, uf, mil cosas. Incluso fuimos visitando todos los lugares citados en el libro de Serrano, como para poder replicar las escenas en el Parque con el debido fundamento.

En diciembre de 2008 Andrea y las tres nenas se instalaron aquí mientras yo iba y venía desde Buenos Aires. En 2010 me traslado yo manteniendo el trabajo a distancia en el Banco lo que fue una gran ayuda por parte de ellos para concretar el proyecto. Mantuve esa vinculación hasta 2012 en que me retiré definitivamente, el Parque mientras tanto se había inaugurado el 3 de enero de 2011.

-¿Existe algún Parque similar a Yucat en otra parte de la Argentina?¿o en el exterior?

-Que yo sepa en Argentina no hay nada parecido, salvo en Tierra del Fuego donde hay un lugar con recreaciones de la vida de los selk´nam, y también hay otro en Misiones sobre los guaraníes pero ninguno con este concepto de Yucat de reconstruir en distintas escenas la vida integral de toda una comunidad prehispánica, que por otro lado ya no existe como tal al haber sido destruida por la conquista. En América del Norte existe la réplica de una aldea de los vikingos del año 1000 en la Península del Labrador pero tampoco es un Parque Temático

-Además de las investigaciones que realizás y que seguís haciendo constantemente, ¿contás con asesoramiento antropológico en la actualidad? ¿Cómo se integra el equipo del Parque?

En el campo del chamanismo me fueron muy útiles las primeras conversaciones con Ana Llamazares en la Fundación desdeAmérica, luego encontrarme con los libros de Carlos Martínez Sarasola especialmente “Nuestros paisanos los indios”, ellos me han ido sugiriendo cosas, y siempre el libro de Serrano o los trabajos más recientes de especialistas como Berberian entre tantos otros.

En cuanto al equipo de trabajo somos muy pocos, Andrea y yo, a cargo de la coordinación general, recepción y visitas guiadas, además de la investigación y el montaje de las escenografías; luego tenemos dos guías del Sitio en temporada, un especialista en recreación para los niños (el Parque cuenta con un lugar de práctica de arco y flecha y otro de molienda para preparar los alimentos como lo hacían los comechingones) y últimamente incorporamos una guía en inglés para los extranjeros.

-En este tipo de emprendimientos así como en museos, centros de interpretación, reservas naturales o parques nacionales se registra una tendencia a sumar a miembros de pueblos originarios como forma de ir logrando sinergias, formas de trabajo conjunto entre indígenas y no indígenas, ¿tiene Yucat alguna previsión al respecto?

-Tengo un cierto “conflicto” con esto, he visto algunos emprendimientos que me han parecido un poco “for export” y no quiero caer en eso en nuestro Parque. Alguna vez intenté algo al respecto y no salió del todo bien, el público incluso puede tomarlo en forma equivocada y producir malos entendidos o faltas de respeto hacia los indígenas. Pero no descarto la posibilidad de hacer algo conjunto en el futuro.

-¿Hablando del futuro, cómo visualizás al Parque?

Luego de seis años el Parque se ha consolidado en su misión, centrada en aportar a que no se pierdan los valores de una sociedad indígena originaria que también sigue viva en el arte rupestre de la región y en los hallazgos arqueológicos pero también en muchas de las costumbres locales y en los descendientes que trabajan por reconstruirse como pueblo. El Parque continuará en ese sentido difundiendo y concientizando a nuestros visitantes y a las futuras generaciones en el hecho de que este pueblo vivió y murió defendiendo su cosmovisión, sus formas de vida y sus territorios.
Lo seguiremos ampliando, con nuevas escenas. Pero siempre con un crecimiento basado en el respeto aprendiendo y divirtiendonos también, recuperando el saber popular y no solo el conocimiento de los comechingones, sino también el cuidado de la flora y la fauna del lugar, protegiendolas y respetándolas. Por eso hemos agregado escenas con ñandúes o lagartos, y agregaremos muchos más, como expresión de nuestra conexión con los otros seres vivos de este maravilloso lugar

-Esta sería una última pregunta por ahora ¿como es la convivencia del Parque con los animales del lugar?

-Los animales de aquí pasean libres por el Parque mientras la gente lo recorre: cuises, lagartijas, zorros, lagarto overo, montaraz, etc. Alguna vez entró una corzuela parda pero ya es raro verlas. Le pedimos al público que no los moleste para poder disfrutar de ellos en libertad. Cuando se hace la molienda del maíz vienen varias especies de aves que ya conocen el ritual de todos los días: chingolo, pica hueso (o petitero de collar), jilguero dorado, cacholote, etc. Muchas veces podemos ver pájaros carpinteros, benteveo, lechuzas, monjita blanca, fueguero, loro barranquero, catitas, y muchos más.

En cuanto a la vegetación, no se ha plantado nada en el lugar, hemos respetado la flora autóctona, contamos con chañar, algarrobo, piquillín, tala, tintitaco, peje (o sombra de toro), jarilla, pencas, cortaderas, huachuma, hasta crece naturalmente el llamado hongo mágico. Aprovechamos a todas las especies para contar su uso medicinal por el saber popular y/o aborigen, así como también algunos usos chamánicos.

Cuando nos dimos cuenta había caído la noche sobre “Yucat, tierra de comechingones”, que también puede ser recorrido cuando las sombras lo inundan, lo que le da a la visita un encanto particular. Nuestros anfitriones nos recibieron con afecto, enorme disposición y una pasión que solo los grandes sueños y las grandes ideas realizadas pueden generar. Les estamos muy agradecidos Alberto, Andrea y familia.

Y nos vamos alejando de Yucat, que resultó algo más que un sueño. Y que nos dejó una certeza: cuando uno viaja a esta parte de las Sierras Centrales es imprescindible visitar, recorrer y disfrutar este lugar único que es un gran homenaje a un fantástico pueblo originario de nuestra tierra.

Contacto:
Dirección. Los Aborigenes 550 (5881) Merlo, San Luis
Teléfono (02656) 477611
Email: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
Sitio web: http://www.yucatparquetematico.com.ar
Blog: http://www.yucatparquetematico.com.ar
Facebook: http://www.facebook.com/yucatparquetematico

Fuente: ElOrejiverde
Fecha:25/1/2017

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