Gather, un documental sobre la Revolución Restauradora
Gather es una obra maestra sobre la identidad indígena, la historia americana y los sistemas alimentarios tradicionales. Dirigido por Sanjay Rawal, con la producción ejecutiva del actor Jason Momoa, este audiovisual se ha convertido en un grito en favor de la soberanía alimentaria y la aceptación del trauma generacional enquistado en ancianos, adultos y jóvenes indígenas.
Gather un documental acerca de la recuperación de la soberanía alimentaria en tres comunidades indígenas de América del Norte. Sus protagonistas son: Nephi Craig, un chef Apache de White Mountain, quien trabaja para abrir el Café Gozhóó, un restaurante que utiliza exclusivamente ingredientes cultivados en tierras apaches. Elsie Dubray, una estudiante de 17 años de la tribu Cheyenne River Sioux, que en su investigación científica trata sobre la dieta tradicional de los búfalos. Sammy Gensaw, un joven miembro de la tribu Yurok, que lidera a un grupo de adolescentes para recuperar las tradiciones de pesca del salmón de su tribu. Y Twila Cassadore, la gran maestra recolectora de los Apaches de San Carlos en California, que enseña prácticas medicinales y alimentarias a los jóvenes de su comunidad.
“Tenemos que introducir a los jóvenes a la tierra, la comida y nuestros sistemas tradicionales de curación. Reconectar a la gente con la idea de quién somos. Y todo empieza con cosas pequeñas, como plantar semillas”, dice Twila Cassadore, la gran maestra recolectora de los Apache. Su figura representa la demostración palpable del poder de la mujer en la comunidad nativa americana y su papel trascendental para traspasar el conocimiento.
“La Nación Roja se levantará de nuevo y debería ser una bendición para un mundo enfermo, un mundo lleno de promesas rotas, egoísmo y separaciones, un mundo que pide luz de nuevo". Con estas palabras de Crazy Horse, líder de la Nación Oglala Lakota se da comienzo a un documental en el que los paisajes se imponen a las ciudades, la vegetación o la fauna gana terreno perdido al ego de las personas, y los alimentos tradicionales se imponen a los productos procesados. Un viaje al interior del alma indígena en un momento histórico repleto de cambios decisivos para su devenir como pueblo con pasado, presente y futuro.
La cita refleja mi esperanza de que algún día el pueblo indígena sea lo suficientemente fuerte y se recupere por sí solo hasta tal punto que su práctica y su enfoque, sus descendientes puedan tener un papel más poderoso en el liderazgo en todas nuestras industrias. Estamos empezando a ver eso con Deb Holland de la tribu Laguna Pueblo, nominada para la Secretaría del Departamento del Interior. Su posición como supervisora de la Oficina de Asuntos Indígenas [una rama del Departamento del Interior de EE. UU.] Sería bastante monumental. Cuantos más nativos tengamos en esos puestos de liderazgo, desde la política hasta la economía, mayores serán nuestras posibilidades de supervivencia.
“La historia de la agricultura en América del Norte siempre ha sido una historia de violencia. Cuando se alentó a los colonos a ir al oeste del Mississippi, se dirigían a tierras que habían sido prometidas a los nativos desde tiempos inmemoriales a perpetuidad (aunque California tenía 18 tratados que nunca fueron ratificados). Entonces, donde sea que veamos una granja, donde sea que veamos un rancho, donde sea que veamos la economía agrícola, está literalmente construida sobre el genocidio”, enuncia el director.
“Eso no quiere decir que cualquiera que viva hoy sea responsable de lo que hicieron sus antepasados. Pero ese trauma histórico está en ambos lados. Los nativos simplemente reconocen que hay un trauma en sus vidas por ese genocidio. Las personas del otro lado no reconocen ese trauma, o si lo reconocen, se niegan a lidiar con él. Estamos en un momento en que los nativos todavía están siendo vigilados por sus formas tradicionales de cazar, por sus formas tradicionales de pescar o por recolectar tradicionalmente en tierra. Ha habido un mayor conjunto de ramificaciones durante COVID y un mayor conjunto de políticas policiales para penalizar a los nativos por el uso de su tierra”, continua.
“El propósito de la película era hacer algo que Indian Country pudiera usar como herramienta. Como equipo de cineastas, nos ha sorprendido el interés de los no nativos en esta película. Una de las razones por las que creo que la película terminó siendo buena fue porque la hicimos para audiencias nativas. No explicamos demasiado; no tuvimos que explicarles a los nativos qué era el genocidio; no tuvimos que pasar por la historia colonial; no tuvimos que explicar realmente el trauma; simplemente nos sumergimos en ese tema. La idea era priorizar Indian Country primero y Indian Country por sí mismo. Deje que las comunidades individuales crezcan, prosperen y fortalezcan en sus propios términos.
La especie tótem de los Lakota es el búfalo, y para los Yurok es el salmón, que obviamente son entidades vivientes del mundo. Los íconos de la sociedad moderna son el iPhone, el automóvil y la computadora, que obviamente son máquinas. Sammy, el joven líder yurok, hacia el final de la película dice: “La revolución industrial ha terminado. Si queremos sobrevivir, si queremos seguir viviendo en la Tierra, debemos ser parte de la revolución restauradora”. También dijo que si desaparece el salmón, lo seguirán los yurok. El padre de Elsie, Fred DuBray, el ganadero de búfalos Lakota, dijo: “Al destruir a los búfalos, intentaron destruir a los Lakota”. Estas son expresiones profundas de la relación que estos pueblos indígenas tienen con el mundo natural.
En algún momento, va a haber un punto de inflexión proverbial en el que la vida simplemente no es sostenible para los que no pertenecen a las élites. Antes de que eso suceda, como sugiere Sammy, debemos replantear nuestra relación con la Madre Tierra y comenzar a practicar cosas que restauran en lugar de extraer.
Lo que Sammy está tratando de decir es que no podemos tener el mismo nivel de consumo que hemos tenido en los últimos 100 años. Tiene que haber un cambio a gran escala en la filosofía. Él y su gente se han referido a eso como la revolución restaurativa, como el principio fundamental de la justicia ambiental.
Historias personales que no se tocan entre sí, pero se entremezclan con material de archivo que enfatiza la violencia sistemática contra los nativos americanos. “La película aborda la destrucción de los alimentos indígenas como táctica de genocidio; la continuación de las políticas genocidas en Estados Unidos que crean disparidades de salud en el país indígena; y, lo que es más importante, el resurgimiento de los conocimientos tradicionales a menudo envueltos en lo secreto y lo sagrado”, dice el director.
Ante una audiencia 100% nativa, se hizo una proyección preliminar de Gather en un auditorio de Colorado. Fue un éxito apabullante. El empujón necesario para atreverse a exhibir el documental sin miedo a traicionar la sensibilidad nativa. “Los personajes están imbuidos de espíritu y su dedicación para con la descolonización es tan diáfana que tan sólo tuve que dejarlos brillar. Como no nativo, tuve la oportunidad de hacer justicia con este tema crítico. Creo que inspirará y motivará profundamente. Pero se mantendrán muchas discusiones, la falta de representación de los nativos en el cine es real”, dice.
Por El Orejiverde
Fuente: https://bioneers.org/native-american-food-sovereignty-interview-with-sanjay-rawal-zmbz2102/
Fecha: 20/01/2023
- Fuente
- Escrito por El Orejiverde
- Categoría: El don de la palabra